Este apartado es uno de los más importantes y se aplica a todas las especies.
Tú puedes ayudarle a crear una situación familiar con el transporte gracias al uso del transportín. Dejarlo cerca en los días previos aumentará su curiosidad y le hará perder el miedo. También puedes dejarlo dentro con la puerta cerrada quedándote a su lado durante cortos períodos; así entenderá que no es algo «malo». Si nunca lo ha visto es normal que llore y dispare su estrés/ansiedad pero con este pequeño ejercicio cogerá confianza superando esta barrera para el día del viaje. Cuando son cachorros es conveniente realizar además un ejercicio de separación pautada con el resto de la camada, dejándolo solo en algunos momentos para que se sienta fuerte e independiente.